lunes, 19 de agosto de 2013


El siguiente documental lo vi hace casi 2 semanas en un festival que se celebra en mi lugar de residencia cada año. Al principio no les voy a negar, me negaba a la idea de ver material pro-ecológico pero una vez que me quedé a presenciarlo, agradecí mucho la oportunidad. Aquí les dejo la información, ojalá tengan oportunidad de verlo.

Koyaanisqatsi.

De la Lengua Hopi: "Vida Desequilibrada".

Género: Documental.
Clasificación temática: Diagnóstico general.
Duración: 87 minutos.
Año: 1982.
País: Estados Unidos.
Idioma: (Sin diálogos).
Dirección: Godfrey Reggio.
Idea Conceptual: Godfrey Reggio.
Producción: IRE - Institute for Regional Education.
Producción Ejecutiva: Francis Ford Coppola.
Edición: Alton Walpole, Ron Fricke.
Cámaras: Robert Hill, David Brownlow, Roger McNew, Neil Bockman.
Fotografía: Ron Fricke.
Sonido: Michael Stocker, David Rivas.
Consultores e Investigación: Thomas Tarbet, Ekkehart Malotki, Michael Lowatewama, James Kootshongsie, Dennis Kootshongsie, John Kimmey.
Fuentes de Inspiración: Ivan Illich, Jacques Ellul, David Monongye, Guy DeBord, Leopold Kohr.
Música: Philip Glass.
Dirección Musical: Michael Hoenig.

Profecías de la cultura Hopi

"Si arrancamos a la tierra sus preciosos materiales estamos invitando al desastre"
"Llegando el Día de la Purificación comenzarán a tejerse telas de araña de un extremo al otro del cielo"
"Podrán caer cenizas que quemarán la tierra y harán hervir los océanos"


Resumen de la película

Koyaanisqatsi es un film no convencional, es muy difícil hacer un resumen o intentar contar su esencia. Tal vez lo más aproximado a la realidad que se pueda decir, es que el hecho de presenciar esta película se convierte en una experiencia sensorial.

Fue lanzada al público hace ya un tiempo considerable, en 1982. Sin embargo el proyecto venía desarrollándose desde 1975, llevando varios años en su concepción y elaboración profunda. Esta obra magnífica y casi hipnótica no tiene diálogos. Los protagonistas son las sucesiones de contundentes imágenes que hablan por si solas, sus juegos con los tiempos, y todo ello magistralmente ensamblado con la música minimalista de Philip Glass. En esta película la música no es un complemento, sino un actor principal.

Muestra una visión única y nunca antes explorada de la colisión entre dos mundos: El mundo artificial y el natural. El desarrollo humano, las ciudades y la tecnología, frente al medio ambiente. La película también intenta mostrarnos "la belleza de la bestia", si es que algo así existe. Por lo general estamos acostumbrados a percibir la belleza en base a paradigmas preestablecidos de lo que es la belleza. Si vivimos en este mundo, el mundo globalizado, altamente tecnificado, todo lo que observamos pasa por ese filtro perceptivo, y por lo tanto perdemos de vista lo esencial. De tal manera no contamos con muchas posibilidades de ver más allá de lo conocido, y Koyaanisqatsi nos coloca precisamente afuera de ese paradigma, como espectadores del curioso y alocado mundo en que actuamos, sentimos y pensamos cotidianamente. Podemos así caer en la cuenta de que nos hemos encerrado a nosotros mismos en la trampa sin salida del mundo artificial que hemos creado. Y este mundo artificial ya ha sustituido completamente al mundo natural. A tal punto, que no vivimos más con la naturaleza, sino por encima de ella, o más bien, afuera de ella. Hemos hecho del mundo natural original, la mera fuente de recursos para poder mantener funcionando al mundo artificial. Y en el último siglo, este mundo artificial se ha convertido en nuestro nuevo mundo natural.

Koyaanisqatsi nos abre una ventana para mirar a este curioso nuevo mundo que hemos creado, y nos propone observarlo desde una perspectiva casi ajena.

La película sin embargo no tiene una intencionalidad específica, carece de un mensaje preestablecido, un significado concreto, ni pretende establecer o demostrar valores. Es una animación de imágenes ensambladas con la música, a partir de la cual el espectador puede crear su propia interpretación, sus propios valores y su personalísima e intransferible experiencia artística. El único objetivo de la película es provocar, plantear preguntas que sólo quien transita la experiencia de verla, escucharla y vivenciarla, puede responder.

El poder de Koyaanisqatsi, por lo tanto, reside en lo que cada espectador quiera hacer con ella, y su propuesta podría resumirse en una sola consigna:

"Hasta ahora nunca habías visto el mundo en el que vives".


Link: http://www.disclose.tv/action/viewvideo/64335/Koyaanisqatsi__Life_out_of_Balance_Full_Length/

(sólo denle clic y se reproduce).

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