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12/13/2013
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Los protectores solares a menudo contienen compuestos de propilo y otros productos químicos cuestionables para tu salud, y muchos de los productos naturales son extremadamente caros debido a la adición de aceites exóticos tropicales para proporcionales esencias. Además, muchos productos comerciales pueden haber sido testados en animales.
Cuando todo lo que necesitas en realidad es una protección barata y segura para los rayos del sol, prueba la siguiente receta de protector solar. Con esta receta obtendrás unos 300 gramos de protector solar.
Pasos
1. Calienta la taza de aceite de oliva sobre una llama baja.
2.Añade 30 gramos de cera de abeja, en trozos si es posible (para que se derrita más rápidamente).
3.emueve constantemente hasta que la cera de abeja se haya derretido completamente en el aceite caliente.
4.Ponte un par de guantes y una máscara. Esto te protegerá del contacto directo con el polvo de óxido de zinc. Añade una o dos cucharadas de polvo de óxido de zinc de grado USP. Añádelo poco a poco, y continúa batiendo constantemente. Asegúrate de que se incorpora bien.
5.Retira la mezcla del fuego. Viértela en un vaso o en un envase de cristal que pueda cubrirse.
Si lo vas a verter en un envase de cuello estrecho, utiliza una manga pastelera para introducir el protector solar.
Consejos
1.Si no puedes encontrar los ingredientes, compra crema de óxido de zinc en una farmacia y aplícalo en lugar de los productos comerciales de protección solar.
2.Prueba a usar otros aceites naturales comestibles; cualquier cosa que puedas comer será segura sobre tu piel.
3.Si lo deseas, añade unas pocas gotas de aceite esencial para una esencia agradable. Si lo haces, comprueba las propiedades del aceite para asegurarte de que el aceite es seguro para llevar al sol y que no tiene efectos secundarios.
4.El dióxido de titanio también funciona igual, o incluso mejor que el óxido de zinc. Sea cual sea, el óxido es el que cumple la función del protector solar.
5.La cera de abeja hace que el producto resultante sea viscoso, como una crema corporal, y mantiene el óxido en suspensión. Puedes probar a variar la cantidad de aceite y cera.
La cera de abeja y el óxido, si no los encuentras en establecimientos locales, pueden comprarse en páginas web de subastas.
Advertencias
1.El óxido de zinc puede ser dañino para la salud, así que evita respirar el polvo. Debes llevar una mascarilla hasta que el producto esté en suspensión.
2.Es mejor dedicar un cazo, una cuchara y cualquier otro utensilio necesario sólo para este propósito, y no usarlos de nuevo para cocinar. Márcalos bien para que sepas bien que no son para cocinar.
3.Es posible que el óxido se deposite mientras el producto se enfría, o durante el tránsito a un ambiente caliente. Si cuando lo estás aplicando, ves que está translúcido, tendrás que remover el óxido desde el fondo. Si no lo haces, no tendrás un producto efectivo, sino una falsa sensación de seguridad. Un producto adecuado debe ser opaco.
4.Mantén alejado del calor directo o puede que la cera se derrita. Coloca en el frigorífico para que solidifique si esto ocurre.
5.Mantén fuera del alcance de niños y mascotas. No debe ser ingerido.
Cuando todo lo que necesitas en realidad es una protección barata y segura para los rayos del sol, prueba la siguiente receta de protector solar. Con esta receta obtendrás unos 300 gramos de protector solar.
Pasos
1. Calienta la taza de aceite de oliva sobre una llama baja.
2.Añade 30 gramos de cera de abeja, en trozos si es posible (para que se derrita más rápidamente).
3.emueve constantemente hasta que la cera de abeja se haya derretido completamente en el aceite caliente.
4.Ponte un par de guantes y una máscara. Esto te protegerá del contacto directo con el polvo de óxido de zinc. Añade una o dos cucharadas de polvo de óxido de zinc de grado USP. Añádelo poco a poco, y continúa batiendo constantemente. Asegúrate de que se incorpora bien.
5.Retira la mezcla del fuego. Viértela en un vaso o en un envase de cristal que pueda cubrirse.
Si lo vas a verter en un envase de cuello estrecho, utiliza una manga pastelera para introducir el protector solar.
Consejos
1.Si no puedes encontrar los ingredientes, compra crema de óxido de zinc en una farmacia y aplícalo en lugar de los productos comerciales de protección solar.
2.Prueba a usar otros aceites naturales comestibles; cualquier cosa que puedas comer será segura sobre tu piel.
3.Si lo deseas, añade unas pocas gotas de aceite esencial para una esencia agradable. Si lo haces, comprueba las propiedades del aceite para asegurarte de que el aceite es seguro para llevar al sol y que no tiene efectos secundarios.
4.El dióxido de titanio también funciona igual, o incluso mejor que el óxido de zinc. Sea cual sea, el óxido es el que cumple la función del protector solar.
5.La cera de abeja hace que el producto resultante sea viscoso, como una crema corporal, y mantiene el óxido en suspensión. Puedes probar a variar la cantidad de aceite y cera.
La cera de abeja y el óxido, si no los encuentras en establecimientos locales, pueden comprarse en páginas web de subastas.
Advertencias
1.El óxido de zinc puede ser dañino para la salud, así que evita respirar el polvo. Debes llevar una mascarilla hasta que el producto esté en suspensión.
2.Es mejor dedicar un cazo, una cuchara y cualquier otro utensilio necesario sólo para este propósito, y no usarlos de nuevo para cocinar. Márcalos bien para que sepas bien que no son para cocinar.
3.Es posible que el óxido se deposite mientras el producto se enfría, o durante el tránsito a un ambiente caliente. Si cuando lo estás aplicando, ves que está translúcido, tendrás que remover el óxido desde el fondo. Si no lo haces, no tendrás un producto efectivo, sino una falsa sensación de seguridad. Un producto adecuado debe ser opaco.
4.Mantén alejado del calor directo o puede que la cera se derrita. Coloca en el frigorífico para que solidifique si esto ocurre.
5.Mantén fuera del alcance de niños y mascotas. No debe ser ingerido.
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