En los últimos años la causa Malvinas ha retomado lugar en las agendas de los gobiernos de Argentina e Inglaterra, y como es costumbre en nuestro territorio, el poder mediático hegemónico continúa operando como un portavoz del imperialismo. Así se observa en el artículo publicado en octubre de dos mil doce por La Nación, titulado: "En Gran Bretaña acusan a Cristina de usar Malvinas como una cortina de humo", donde las palabras del diario británico The Telegraph se hacían eco en papel argentino. En ese mismo papel, pero en febrero del mismo año, en otro artículo titulado "Cortinas de humo" escrito por Luis Majul se afirmaba que "(...) Cristina Fernández pretende "malvinizar" la agenda de este año, para que la sociedad y los medios no discutan sobre el ajuste (...)". Además, días después, se publicaba una nota de Luis Romero titulada "¿Son realmente nuestras las Malvinas?".
Resulta sencillo advertir que algunos periodistas e intelectuales argentinos, en compañía con medios nacionales como el mencionado, coinciden con la mirada foránea en relación a la causa por la soberanía de las Islas Malvinas. Tal es así, que doce días después del artículo de Majul, La Nación publicaba un documento titulado "Malvinas: un grupo de intelectuales pide cambiar la política", dónde unas 17 personalidades argentinas se pronunciaban en contra de los derechos de millones de argentinos, pero esta vez, haciéndose eco en papel inglés: "Falkland Islands: Argentina's dissenters" -BBC news.
En febrero de este año el diario Clarín, en una explosión de creatividad periodística publicaba: "Malvinas es una cortina de humo", allí Lord Montgomery afirmaba: "(...) cuando Argentina está en serias dificultades políticas y económicas, inflación rampante, deuda, vuelve el caso Malvinas. Cuando hay una crisis, Malvinas asoma como una cuestión para distraer a la gente. Es una cortina de humo, una distracción, y no es el único país que lo utiliza en ese sentido". En efecto, el humo está, ¿pero quién está haciendo el fuego?
Resulta curioso que mientras algunos medios argentinos se pronunciaban a través de sus periodistas a favor de su majestad, se hacían públicos en medios extranjeros algunos datos relacionados a la gran crisis económica que vive Europa desde hace ya varios años. Decía en marzo del 2012 El Economista (México); "Desempleo en Inglaterra mantiene niveles históricos", y meses más tarde, El Mundo (España) publicaba: "La crisis económica, ¿origen de más de 1.000 suicidios en Inglaterra?".
Días después de las declaraciones de Lord Montgomery, "Gran Bretaña acusó a la Argentina de tener un comportamiento agresivo e intimidatorio", según publicaba La Nación, quizá omitiendo que en enero "Inglaterra enviaba 150 soldados a las Islas Malvinas", como nos informaba El País (Uruguay). Mientras la Argentina impulsa el reclamo desde el derecho internacional, con apoyo de muchos países de la región latinoamericana, y con exposiciones diplomáticas frente a la agrupacion internacional en las Naciones Unidas, la realeza insiste con militarizar la causa Malvinas y buscar apoyo de sus aliados: "Reino Unido exige apoyo francés en una posible guerra por las Malvinas" -Russia Today.
No contentos con la intimidación mediante la fuerza de las armas, "Gran Bretaña votó de forma negativa para que no pueda acceder a nuevos créditos del Bid y el Banco Mundial, en represalia a la política que viene llevando el gobierno nacional en torno al conflicto" - Fortuna Web. Pero al mismo tiempo que se ejecutan medidas en contra de la economía argentina, la calificadora de riesgo Moody's rebajó la nota de la deuda del Reino Unido -Cronista, dejando nuevamente al descubierto el retroceso en la economía inglesa.
El único portal de noticias que se pronunció de manera clara al analizar el tema Malvinas, fue el portal Ruso: Russia Today, que en su artículo Petroleras británicas, ¿'caballo de Troya' para militarizar las Malvinas?, desenmascara diversos aspectos de la estrategia británica dejando claro la intención de mantener soberanía sobre las Malvinas debido a sus recursos naturales, mas no así por los isleños.
Recientemente, en la búsqueda de aliados que apoyen los movimientos militares del reinado, el gobierno de los Estados Unidos afirmó que no se pronunciará sobre la soberanía de Malvinas -Clarín, pero que reconoce sin embargo, la administración de facto que ejerce Reino Unido sobre las islas. La respuesta británica, parece haber sido movilizar un nuevo buque de guerra con armamento nuclear a la región, lo que provocó la ia ante la ONU por parte de Argentina -Cronista.
Entre tantos artículos periodísticos que informan y desinforman, queda claro que no es fácil evitar la confusión intencionada que generan algunos medios argentinos. En la batalla que libran que contra el gobierno nacional y la efectiva aplicación de la ley de medios, incurren en traicionar al pueblo argentino con titulares a favor de los intereses foráneos y sus propios negocios. Basta con observar algunos comentarios de la nota publicada por Clarín, "Cómo es la fragata Argyll que el Reino Unido manda a Malvinas", para ver cómo influyen en la opinión pública.
No existen dudas respecto de la causa Malvinas, las islas son Argentinas. Por eso "la duda", es sembrada por quienes manipulan la verdad, que hacen las veces de repetidoras del discurso cipayo, traicionando la soberanía nacional y confundiendo a la sociedad. Las corporaciones multimediáticas y sus ejercitos de periodistas mercenarios son el enemigo, gurkhas al servicio del ierio.
FUENTE