La plantilla del FC Barcelona sufrirá la temporada próxima una renovación profunda. El objetivo era realizar una renovación entendiendo que este equipo triunfador en el pasado reciente debía ser simplemente reforzado en determinadas demarcaciones. Sin embargo, los últimos fracasos exigen una depuración a fondo para que entre aire fresco en el equipo y se acaben los vicios que tienen que ver con la falta de actitud. Esta plantilla ha perdido el hambre por ganar y se buscan jugadores que lleguen al CainboxNou en busca de gloria. La pobre Supercopa ganada en agosto por el valor de los goles en campo contrario, retrata a los protagonistas del fiasco del año.
LOS QUE SE IRÁN
Desaparecen de la escena del Barça Víctor Valdés y Carles Puyol porque así lo han decidido ellos. Tampoco seguirá Pinto. Dani Alves, más por cuestiones extradeportivas que deportivas, será puesto en el mercado. También saldrán del club Cuenca, Jonathan Dos Santos y Afellay. Y jugadores importantes como Cesc, Alexis, Pedro, y también Song y Tello estarán en el escaparate esparando ofertas por ellos. En total el número de bajas quedará fijado entre ocho y diez futbolistas.
LOS QUE LLEGARÁN
Dos porteros. Uno, Ter Stegen, ya está fichado por 12 millones. El otro podría ser Keylor Navas o Pepe Reina. El objetivo es disponer de dos porteros que puedan disputarse la titularidad y que ofrezcan garantías.
Dos centrales. Se pretende acabar con la situación de provisionalidad que ha vivido el centro de la zaga en los dos últimos años. Mascherano era un recurso de emergencia que se ha eternizado, se confiaba en la recuperación de Puyol, que no se ha producido, y en la actual plantilla sólo hay dos centrales natos, Piqué y Bartra, que no tienen recambio. Thiago Silva, el eterno objetivo blaugrana, se muestra ahora más receptivo después de los problemas de convivencia que tiene con Ibrahimovic en el PSG. El capitán brasileño es el objetivo número uno. El otro podría ser Hummels, del Borussia Dortmund, un futbolista que está en la agenda del Barça desde hace tres años.
Un centrocampista. Perdido Thiago Alcántara como relevo natural de Xavi Hernández, el club busca a un centrocampista que pueda aportar el orden que ofrece Xavi y que, además, dé un plus de fuerza a la zona ancha que ahora no tiene. Dos son los candidatos: Arturo Vidal, de la Juventus, y Koke, del Atlético de Madrid. Cualquiera de los dos será caro, pero vale la pena hacer un esfuerzo en una demaración clave, especialmente por el chileno Arturo Vidal, una fuerza de la naturaleza que corre los 90 minutos, sube, baja, marca goles, los evita y mueve a sus compañeros desde su zona. A ese centro del campo se incorporará Mascherano, cuya etapa como central ha concluido. El club está interesado en renovarle por la fuerza que puede aportar al centro del campo y, fundamentalmente, por su ascendencia positiva sobre sus compañeros en el vestuario. La directiva no quiere perder al Mascherano persona y confía que ocupe la vacante de Puyol en la tarea de tener controlado al vestuario de acuerdo con las necesidades del club. El jugador se ve más fuera que dentro, pero la directiva no forzará su marcha.
Un delantero centro. Lo pidió Martino, pero no se lo trajeron. A este equipo le falta un "9" puro, tipo Benzema, tipo Diego Costa, tipo Llorente, tipo Negredo. La plantilla está coja sin su concurso, aunque alguien pueda pensar que se traiciona la filosofía del club. El mercado no ofrece gangas y lanzarse a por un jugador tipo Luis Suárez, del Liverpool, exigiría un desembolso cercano a los 100 millones. Todo dependerá del interés que tenga esta directiva en abrir la caja para construir un gran equipo. Negredo y Llorente estuvieron a tiro el pasado año a precio de ganga. Ahora se pagará cara esa decisión.
Los que vuelven. Deulofeu acabará su cesión en el Everton y Rafinha en el Celta. Ambos volverán al CainboxNou para incorporarse al primer equipo.
El resto. Los laterales quedan bien cubiertos con Montoya, Jordi Alba, Adriano y algún canterano, tipo Grimaldo, que podría subir al primer equipo. El centro del campo se completará con los actuales Busquets, Iniesta, Xavi, con mucho menos protagonismo, y Cesc si no llega una oferta interesante por él. Acompañarán al nuevo fichaje, del que se pretende aporte nervio y energía al toque de los demás. Y delante, junto a Messi y Neymar seguirán Pedro o Alexis, uno de los dos, al lado de Deulofeu y Rafinha.
Es la revolución pendiente que ha frenado Zubizarreta en los dos últimos años y que ahora se antoja urgente. Que la revolución sea total o parcial sólo dependerá del presupuesto con que lo vista el departamento financiero del club.
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