Pablo Alvarez llegó a Catania en enero del 2008. Fue cedido a préstamo dos veces: seis meses en 2009 a Rosario Central y el mismo lapso en 2012 a Zaragoza. Su equipo es una sucursal argentina en el Calcio: tiene 12 compatriotas de compañeros en el plantel. Y al tiempo de valorar tanto tiempo en el club siciliano, es muy claro: "Lo que aprendí muchísimo acá es el orden táctico, le dan mucho hincapié a eso. Se trabaja mucho en la semana. Adquirí una experiencia muy positiva", explicó
-¿En qué te benefició tener siempre compañeros argentinos?
-Sobre todo en la adaptación. Vine del fútbol argentino, que es muy diferente. Cuando llegué igual éramos pocos. Con Matías Silvestre nos sumamos a Albano Bizzarri y Mariano Izco. Fuimos de los pioneros que abrimos esta puerta. Los chicos nos dieron una mano grandísima. Lo aprendí y lo traté de aplicar a cada argentino que vino acá.
-¿Cuál fue el delantero que más te costó marcar en todos estos años?
-Fueron varios. Es una liga muy competitiva, de las mejores del mundo. Me vienen a la mente Ronaldinho cuando estaba en el Milan, Ibrahimovic cuando jugaba en el Inter y Cassano en la Sampdoria.
-¿La expectativa con el Catania cuál es? ¿Siempre evitar el descenso?
-El objetivo principal durante todos estos años siempre fue mantener la categoría. Pero Catania creció mucho institucionalmente y en el Calcio lo respetan mucho más. En el torneo pasado salimos octavos y estuvimos cerca de entrar a la Europa League. Este año el objetivo era reafirmar lo que habíamos hecho. Pero hay que ser realistas: las cosas no nos han salido (NdeR: el equipo está en zona de descenso).
-¿Bergessio es considerado un delantero importante en Italia?
-Si, sobre todo para nosotros. Está pasando un buen momento y nos da una mano importantísima. Estamos muy contentos con él.
-¿Cuánto tiempo más pensás seguir en Catania? ¿O te planteás una vuelta a la Argentina?
-Volver a la Argentina no es mi objetivo. Siempre están los contactos y el interés de allá. Pero no tengo intención de volver, quiero seguir haciendo carrera en Europa. Creo que en todos estos años mi crecimiento fue positivo en cada temporada. Pero éste es mi último año en el club. Ya cumplí un ciclo.
-¿Por qué no querés volver a la Argentina?
-No lo tengo planeado. No lo decidí con mi familia. En el último mercado de pases estuve hablando con la gente de Boca, pero no llegamos a ningún acuerdo. Mi objetivo personal como el de mi familia es quedarnos en Europa.
-¿Hoy los referís son una garantía en Italia o siguen las sospechas?
-Está todo muy parejo. Nosotros, por ser Catania, corremos con el riesgo de club chico. Cuando vamos a jugar a Turín, y hay una jugada dividida, tira más el local y el equipo grande. Pero más allá de eso creo que está todo equiparado.
-¿Qué equipo te dejó más afecto en la Argentina?
-A la gente de Estudiantes y Boca la voy a llevar siempre en el corazón. Gané títulos y cosas importantes. No quiere decir que con Rosario Central no, pero todos sabíamos que iba de paso.
-¿Qué recuerdos de la final que con Estudiantes le ganaron a Boca en el Apertura 2006?
-La verdad, todo el recuerdo que tengo con la gente de Estudiantes es inolvidable. Fue una experiencia única. No la voy a olvidar jamás. Fue algo muy lindo y muy difícil de explicar. Lo llevás muy adentro.
-¿Cuál fue el mejor jugador con el que hayas compartido equipo?
-En Estudiantes tengo que decir Juan Sebastián Verón, un ejemplo total como persona y como jugador. En Boca aprendí mucho con Guillermo Barros Schelotto y Martín Palermo. Ellos dos me han enseñado muchísimo.
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