No son días fáciles para la estrella del cine, Jackie Chan.
Si la detención de su hijo el lunes pasado, luego de una redada efectuada por la policía china, fue un golpe duro para el famoso actor, las posibles sanciones que arriesga el joven son lapidarias: cadena perpetua o la muerte, luego que la policía china encontrara en su domicilio 100 gramos de hachís y otras drogas.
Según la información local, las cantidades de sus sustancias encontradas serían tanto para el consumo como su presunta venta.
De acuerdo a lo detallado por Milenio.com, Jackie Chan compartió en la red social Weibo -conocido como el "Twitter Chino"- un sentido mensaje donde expresar "avergonzado" por la situación y reconoce estar experimentando el peor momento de su vida.
Jaycee Chan, como fue identificado el joven, fue detenido con su amigo Kai Ko, actor taiwanés de 23 años, aparentemente en un sauna en el centro de Beijing, en el marco de una dura ofensiva de las autoridades chinas para combatir el tráfico de drogas y la prostitución, entre otros delitos para el gigante asiático.
El actor, especialista en artes marciales, fue nombrado en 2009 "embajador de la policía" en la campaña antidrogas del Gobierno chino.
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