viernes, 7 de junio de 2013






































Emotiva llegada de Mohamed a Huracán, segunda casa. El Turco, ovacionado por los quemeros, dejó en claro que no resignó nada para volver: "Estoy donde quiero estar", dijo quien el jueves pasado casi deja afuera al Mineiro de la Copa.

Emoción al palo. Mohamed en Huracán, en el gimnasio que lleva el nombre de unos de sus hijos. "Turco, querido, la Quema está contigo", "Olé, olé, Turco, Turco", fueron algunos de los hits que resonaron, que hicieron palpita a full el corazón de uno de los máximos símbolos en Parque Patricios. El técnico se sentó frente a la mesa, escuchó y lloró ante semejante situación, afecto y sueño cumplido, el volver a dirigir al club de sus amores.

Eran cerca de las 19.35 y, como viene anticipando Olé desde hace tiempo, finalmente el Turco se presentó como nuevo entrenador del Globo. Sí, pasa de haber jugado el jueves pasado los cuartos de final de la Libertadores, de casi haber dejado afuera al Mineiro de Ronaldinho, a la BN con el club que más quiere. "Me pone feliz ver a la familia quemera junta, vengo acá para unir en el club, que todos tiremos para el mismo lado. Y esperemos que en un año se cumpla el objetivo de volver a Primera", dijo, con una sonrisa, mientras escuchaba más cantos y gestos de cariño en su segunda casa, Y quiso aclarar que no resignó nada para volver: "Es mentira que resigné cosas. Es un desafío muy importante. Estoy donde quiero estar. Estar acá no tiene precio, es lo más lindo que me puede pasar", explicó el Turco, quien regresó seis años después. Y al lugar donde esperaba estar.






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